sábado, 21 de febrero de 2015

Espacio vital y Expresión Corporal

El espacio se puede considerar en varios contextos: como la distancia entre dos objetos, más o menos cercana, un espacio matemático; o por ejemplo, un espacio inventado o no, que queda por determinar en función de una actividad y de la creación de su ejecutor, en Expresión Corporal.

Me gustaría abordar este concepto desde el sentido de nuestro espacio vital, ese que no queda delimitado por muros, ni objetos, ni vallas...ese que simplemente cumple los márgenes de la persona en su comodidad.

Este espacio que abordamos es conflictivo en algunas ocasiones, bien por invadir o ser invadido por otra persona, o bien por sentirse encerrado entre objetos y agobiarse (claustrofobia).

Me gustaría hacer hincapié en el primero, ya que  esta asignatura requiere que permitamos en ocasiones realizar excepciones a la invasión de este área.

En primer lugar, el elemento que debemos precisar es la confianza con el compañero, esa permisividad de nuestro espacio debe ser recíproca y es ahí donde crearemos un vínculo de, al menos, cierta comodidad, que dejará a un lado la vergüenza y conseguirá una óptima realización del ejercicio.

En segundo lugar, implícito en el primero, tendremos la movilidad, y esa movilidad vendrá determinada por el uso de nuestro espacio y del compañero con especial soltura para no sentirse encerrado.

El último de los elementos sería el contacto, de hecho es fundamental adquirir cierta confianza ya que generalmente se pasa peor cuando los ejercicios son de contactos continuados y todos pensamos en si deberíamos separarnos del compañero o no, si le estaremos incomodando...

Habitualmente son posturas en las que nos tenemos que dar las manos, mirarnos cara a cara, o adoptar posiciones incómodas. 

La coordinación será vital a la hora de la ejecución, para que desde fuera pueda apreciarse la fluidez de los movimientos, y además no suframos ningún tipo de percance como golpes, empujones, arañazos...

A todo ello, podríamos añadirle un concepto nuevo, que nos puede ayudar a entender en otro contexto el espacio, se trata de la "kinesfera". Este elemento produce ciertas sensaciones en el emisor (bailarín), pero también en el receptor (todo espectador, compañero...).

Las sensaciones que producen, transmiten una movilidad conjunta entre el sujeto y el espacio, es decir, es el propio emisor el que siente su cuerpo en el espacio y su acompañamiento, y es el espectador el que ve perfectamente definida la fluidez del artista con el espacio y su utilización.

La coréutica es uno de los componentes de este elemento, y nos habla de ejes y direcciones en las que se dirige el movimiento y la energía, es decir, una estructura virtual de movimiento del ejecutor.

Esta reflexión viene determinada por varios ejercicios realizados en clase, y varias escenas curiosas que me llamaron la atención, como la invasión del espacio de otra persona en las jacas, o los ejercicios de giros alrededor del compañero.

David y Guille realizando una actividad de equilibrios en clase del profesor Kiko Miralles.

Bibliografía:

- Danzarevista.(2014). Recuperado el 26 de febrero de 2015, de: http://www.danzarevista.com.mx/2014/10/propiedades-de-la-kinesfera.html

Christian Navarro.

1 comentario:

  1. Buen trabajo de reflexión. Me gustaría que buscaras un artículo en la base de datos de la biblioteca y pongas en práctica lo enseñado por Amparo, sobre el espacio y la expresión corporal, o algo relacionado también con la kinosfera (¿qué es eso?). Léelo y añade análisis y conclusiones a tu post, para enriquecerlo más.

    Ánimo.

    Marta A.-

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